miércoles, 15 de abril de 2009

LA QUE NO ENTENDIÓ (a Amparo Reyes M)

Suele suceder que a veces
me caigo de la vida,
que se vuelve pesada, opaca
este mundo patas arriba me
cerca en el miedo,la tristeza, la impotencia;
por instantes me converso
-en el caos de mis palabras-
me lloro, me incapacito
huyo tras de mí.

Tu...
en la otra orilla
en el sitio donde habita algo de orden.
Te bifurcas en salidas;
conoces los laberintos de esta realidad que
me desborda; sabes bien la lógica
inversa del deber ser.
Pasas como tornado
sacudiendo mi razón.

Tu…
con tu insolente y
entrañable solidaridad;

Tu…
que no practicas los límites de Amistad
-cuando la causa es proteger al retraído-;

Tu…
que llevas en tu bolso
en tu elevado sentido de
lo Justo en tu risa y en tu pelo,
un atado de razones para no
callar cuando la Vida está siendo
desplazada,violentada, silenciada.


Tu…
que no aceptas que soy un caso perdido,
que a veces me canso de los engaños
que invento para despertar cada día.


Tu…
que no sabes que aún
octogenaria seguiré
ida de este mundo
aún patas arriba.

Namid A( Abril 13 de 2.009)